Cultura

Iron Maiden en las calles de Liniers

Difícil es poder recordar la cantidad de veces que Iron Maiden se presentó en nuestro país. Incluso tenes que pensar un poco más para acordarte de las veces que los viste. Pero lo que nuestra memoria nunca va a borrar es que cada vez que Steve Harris y compañía se presentaron te volaron la peluca.

Esta vez el motivo de la visita fue la presentación de The Book of Souls, el último disco de estudio lanzado en 2015, este 15 de marzo en el estadio de Vélez Sárfield ¿Vieron que no sólo se llena con Luis Miguel? ¡40 mil metaleros hubo esa noche!

Una puesta en escena impactante, ambientada en la espesa vegetación que rodea a las ruinas mayas, fue el telón de fondo donde, luego de que sonara el clásico de UFO Doctor, Doctor,  salió a la escena con If Eternity Should Faild, tema que da inicio a su última producción.

Luego de la hitera Speed of Light, también parte del nuevo material, apareció el primer clásico: Children of The Damned. Luego, el tema dedicado a Robin Williams, Tears of a Clown continuando con la presentación de The Book of Souls.

Pero no sólo hubo tiempo para las canciones: el momento emotivo de la noche fue el japiberdei  en honor al mandamás de la banda, Steve Harris, que cumplió nada menos que 60 años (quién pudiera llegar a esa edad así…). También hubo un agradecimiento de parte de Bruce Dickinson hacia la producción de la banda a raíz del inconveniente con la turbina que tuvo Ed Force en Chile.

Hablando de Bruce… Campeón de esgrima, profesor de historia, piloto de aviones de línea, entre otras cosas que sólo son accesorias: este hombre nació para ser cantante de banda de rock que llena estadios. Pocas personas en el mundo son tan aptas como él para ser un frontman con una banda de rock atrás y miles de personas excitadas delante. Tiene una voz que asombra por la capacidad que conserva, además de moverse por todo el enorme escenario saltando, corriendo, gesticulando (quién pudiera llegar a esa edad así, parte II).

Las arrugas, y el notorio paso del tiempo en el aspecto del resto de la banda (Nicko Mc Brain parece mi tía Marta), es una imagen que se contradice con la pulcritud y lo ajustado que suenan. La interpretación del tema que da nombre al disco demuestra el altísimo nivel que tiene la bestia en vivo.

Como siempre, hubo lugar para Eddie, la afamada mascota de la banda, momento en donde todos inevitablemente tenemos la misma sonrisa de un nene cuando ve al Sapo Pepe. Y como siempre también, la catarata de hits al final: el poguero Fear Of The Dark, la oscura Hallowed Be Thy Name y el cierre con The Number of The Beast, Blood Brothers con mensaje de paz y hermandad entre naciones incluidos y Wasted Years.

Otro “como siempre” más: mientras sonaba de fondo Always Look on The Bright Side of Life de Monty Phyton la alegría de los fieles metaleros por haber sido testigos de una nueva noche histórica para el Heavy Metal.

Soporte de Lujo

Anthrax tuvo una arrolladora presentación enmarcando una noche ideal. Una piña bien puesta fue el comienzo con Caught in a Mosh, Got the Time y Antisocial. Luego presentaron temas del disco lanzado este año, For All King, para cerrar luego con Indians. Seguramente Scott Ian es uno de los tipos más carismáticos del metal, y la gente se lo hizo saber en todo el set. Un bajista que se hace notar por su talento como Frank Bello, y con el corte de Emilio de Luz Mala, Joey Belladona demuestra que es la voz definitiva de Antrhax.

Por: Matias Barrios, conductor de de Enlace Metálico