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Pepe Sand, a un paso de un top ten histórico

Este sábado a las 16.15 San Lorenzo y Lanús se medirán en el Monumental por la final del Torneo de Transición 2016. Para el Granate, ganador de la zona 2 de punta a punta, la posibilidad de consagrarse en la Primera División por 2da vez en su historia tendrá un valor agregado: José Sand tendrá la posibilidad de convertirse en —al menos— el décimo mejor promedio del máximo goleador de un campeonato corto.

El récord en esta materia lo ostenta Martín Palermo, quien en el Apertura 98 fue el único en superar el promedio de 1 tanto por partido al marcar 20 en los 19 encuentros, lo cual da un promedio de 1,05.  Su escolta es Germán Denis con 0,95 —logró 18 conquistas en el Apertura 2007. Después de estos, los siguen con dos pelotones: uno con 0,89 (17 goles) José Luis Calderón, en el Apertura 99, Martín Cardetti en el Apertura 2001 y Luciano Figueroa en el Clausura 2003.

Con 16 goles —un promedio de 0,84— aparecen cuatro nombres: Roberto el Pampa Sosa, en el Clausura 98, Esteban el Bichi Fuertes, en el Clausura 2000, Andrés el Cuqui Silvera en el Apertura 2002 y Mariano el Tanque Pavone en el Clausura 2005. Éstos completan la tabla de los 9 mejores promedios entre los máximos goleadores de torneos cortos.

A partir de allí encontramos un grupo más extenso con 0,78; es decir, 15 tantos. En este grupo se cuenta el propio José Sand, que alcanzó esta cifra en el Apertura 2008. En el actual Torneo de Transición 2016, Pepe cuenta con 13 conquistas en 16 partidos jugados. Si marca un gol en la final, su promedio —14 en 17— será superior a aquel 2008. Por lo tanto, se ubicará décimo en esa tabla entre los artilleros de torneos cortos.

Pero ésta no es la única posibilidad para el goleador del Granate: si consigue un doblete, su récord pasará a ser de 0,88 y se ubicará sexto en esta tabla. Ante un triplete, saltará directamente al podio con 0,94. Un panorama más improbable serían los cuatro tantos (con el que superaría a Denis alcanzando 1  gol por partido) o los cinco, con el cual obtendría la hazaña absoluta —1,058 contra 1,052 de Palermo. Lo cierto es que éste no será una prueba más para el correntino: será la chance para el Granate de consagrarse por segunda vez y para el Pepe de quedar en la historia con al menos una conquista, que es de lo que más sabe.