Cultura

Ingéneros se suma al paro internacional de mujeres: 8 de marzo en la UTN Avellaneda

Ingéneros adhiere y convoca al paro internacional de mujeres este 8 de marzo. Compartimos la editorial del Programa por la Equidad de Géneros de la UTN-FRA. 

Este 8 marzo la tierra tiembla porque las mujeres del mundo alzaremos nuestras voces para decir las muchas y diversas razones que nos llevan parar. No pensamos todas igual, claro que no, pero cada una desde su lugar, conocedora de su realidad cotidiana levantará su voz y dirá, tal vez, que no es justo que por la misma tarea tengamos salarios más bajos. En promedio la brecha salarial entre varones y mujeres es del 27%.

Algunas compañeras denunciarán que para ocupar puestos de decisión o de dirección técnica deben someterse al maltrato y el desprecio de colegas. Que todavía hoy se duda de nuestra capacidad para desempeñarnos en campo de ciencia y de la técnica.

Paramos para que se reconozca que las tareas domésticas y de cuidado son trabajo y lo son porque transfieren valor  y porque agregan en promedio 3 horas a nuestras jornadas de trabajo. Las tareas de cuidado deberían ser responsabilidad de toda la sociedad.

Muchas paramos porque no aceptamos que nos sigan matando. Entre enero y octubre de 2016 se cometieron 230 femicidios, 294 hijas e hijos se quedaron sin madre. En promedio este año en nuestro país se asesina a más de una mujer por día.

Repudiamos todas las formas de violencia de géneros: la humillación, la violencia física y económica que aumenta nuestra vulnerabilidad en los contextos de violencia familiar.

Otras les diremos al mundo que al salir a la calle no queremos más soportar las miradas obscenas y el acoso callejero. Que queremos movernos por los espacios públicos sin temor a que nos dañen. Que en lugar de pedirnos que nos cuidemos en la calles les digan a los acosadores que nos dejen de acosar.

Se suman también las voces que denuncian la complicidad institucional con las  redes de trata y la explotación sexual. Las que señalan a los medios de comunicación porque banalizan la violencia de género y la tratan de manera irresponsable en sus crónicas policiales.

Se escucharán reclamos por el acceso a la atención a la salud que incluya el aborto libre y gratuito, que ninguna niña sea obligada a la maternidad. Que el Estado asuma su responsabilidad para garantizar los derechos conquistados por las mujeres en siglos de lucha.

Y una voz muy fuerte dará vuelta a la tierra y dirá: No estamos solas. Y no lo estamos porque sabemos de solidaridad. Las mujeres contamos con otras mujeres cuando desarrollamos nuestras carreras profesionales y llevamos adelante las tareas de cuidado. Para salir a trabajar nosotras dependemos de otras mujeres, necesitamos de mujeres para migrar, contamos con otras mujeres cuando enfrentamos a la violencia doméstica. Y así, tendiendo redes, es que aprendimos acerca del poder de la solidaridad, por eso sabemos que juntas y organizadas podemos. A esa solidaridad, a esa hermandad internacional, suma su voz y su compromiso el Programa por la Equidad de Géneros de la UTN-FRA.