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Trenes y subtes mantienen el paro y los colectivos comienzan a circular
19 | diciembre | 2016
La medida de fuerza es en reclamo por la sanción de la ley que eleva el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias. Los principales referentes del sindicalismo encabezaron asambleas en las diferentes terminales. También se ve afectado el transporte aéreo en las terminales del Aeroparque metropolitano y Ezeiza, por la adhesión de los trabajadores de Aerolíneas Argentinas y Austral.
Según declaraciones del titular de la UTA, Roberto Fernandez, en La Tecno, el reclamo pide la deducción del «viático, las horas extras, los francos y los feriados», a la vez que aseguró que el gravamen «es muy caro para todos los trabajadores». En este sentido, recomendó al Gobierno «buscar otra manera» para financiar el impuesto y propuso un canon «al juego» como alternativa para que «los trabajadores no sean siempre los que pagan la fiesta».
Tras las asambleas por el Impuesto a las Ganancias, los colectivos de corta distancia comenzaron a circular desde las 7 de la mañana. Todas las líneas de ferrocarriles y subtes sostendrán la medida hasta el mediodía.
El paro de transporte que llevan a cabo los gremios del transporte de pasajeros tuvo una total adhesión: colectivos, subtes y trenes no funcionaron desde primera hora de hoy. A las 7 de la mañana, tal como estaba establecido, los ómnibus comenzaron a restablecer el servicio. Todas las líneas de ferrocarriles y subtes mantienen la medida hasta las 12 del mediodía.
La estación de trenes de Constitución mantiene cerradas sus puertas. Diferente fue el caso de la cabecera de Retiro que sí se abrió al público aunque sólo para que los usuarios tengan un lugar más cómodo para esperar. Por su parte, los taxis funcionan con normalidad, aunque condicionados por el gran flujo vehicular.
Consultado el dirigente gremial sobre el balance del primer año de gestión de Mauricio Macri, el sindicalista dijo que «se están perdiendo muchos puestos de trabajo» y, aunque adujo «buena voluntad» por parte del Ejecutivo, aseguró que «será difícil recuperarnos con esta situación que vive la Argentina». En tanto, calificó de «chiquilinada» el puntaje con el que el Presidente se autoevaluó y se negó a calificarlo, ya que «él sabe bien el puntaje que tiene».
De cara al 2017, aseveró que se llega «con mucha incertidumbre» y reclamó que el Gobierno «escuche» para «sacar la Argentina adelante». Respecto a la posibilidad de una huelga general, respondió que «no se trata de hacer paro» sino que «hay que buscar soluciones entre todos». A su vez, añadió que «queremos que al Gobierno le vaya bien» y explicó que, si bien hay diálogo, «cuesta entenderse». «Estamos evitando de cualquier forma un paro general porque no queremos derrotar a nadie», aseveró.
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